¿Ser o no ser?: el dilema tras el debut literario
PUBLICACIÓN. La actriz, emprendedora y productora de eventos estrena "Ser", un poemario que nació en los meses más duros de la pandemia.
A finales de 2021, en aquellos momentos complejos de una crisis sanitaria que parecía no acabar, Valentina Krzeminski se puso a escribir. Aprovechó el tiempo de encierro para conectarse con un ejercicio creativo que sin proponérselo comenzó a salir en rimas. Dice que el recurso estético surgió de manera natural. Así escribió cerca de 60 piezas relativamente breves que nunca pensó que se transformarían en su carta de presentación cuando llegó a vivir a Valdivia en octubre del año pasado.
Una vez instalada en la capital de Los Ríos fue a conocer la librería Los Libros del Gato Caulle, espacio para el cual propuso jornadas de lectura de poesía. Fue ahí que recibió la sugerencia de publicar su trabajo que nació en pandemia y que hasta ese momento era solamente para deleite personal.
Reflexiones
Valentina Krzeminski es actriz y reconoce que la escritura fue canalizadora en momentos en los que tuvo que tomar decisiones cruciales. Durante la pandemia se transformó en emprendedora del rubro de la alimentación. Tras la vorágine de un primer año de éxito absoluto, llegó una calma que le permitió reflexionar sobre lo que estaba ocurriendo en su vida y a su alrededor.
"Cuando me puse a escribir recién tomé conciencia de todo lo que estaba pasando. En mi obra hay mucha influencia de la música gracias a la experiencia de haber sido parte de un coro donde aprendí a leer partituras y tocar la flauta dulce. Por eso identifico que cuando leo los poemas, hay una musicalidad que acoge", explica.
Y agrega: "Nunca había estado tan conectada con la poesía hasta que ocurrió un movimiento interno en mí que me motivó a escribir".
El despegue
Además de la influencia de ciertos autores, detrás del trabajo de la poeta está el abrazar su propia identidad. "Entré en una búsqueda de descubrir quién soy yo finalmente. He estado siempre en un estado de querer ser como otros, porque veo que es lo correcto, pero eso me llevó a perder el foco de lo que realmente me identifica", aclara.
Ese mismo dilema lo planteó en el nombre de su cuenta de Instagram llamada "Ser mi propio ser", que hasta cierto punto sirvió para titular su poemario debut: "Ser". La obra autogestionada tuvo su lanzamiento en Los Libros del Gato Caulle, donde la escritora además integra un club de lectura. Para la publicación hizo una selección de 33 poemas, acompañados por dibujos de su propia autoría.
¿Qué busca al transmitir su propia experiencia como escritora que se animó a publicar?
- El gran objetivo de este poemario es inspirar a otros a crear. Hice un librito pequeño, de bolsillo, con el que quiero dejar testimonio de que si yo puedo, entonces tú también puedes. Yo no estudié literatura. No me considero poeta. Y sin embargo, lo hice. Mi mensaje es que no requieres de título para atreverte a plasmar todo aquello que puedas tener en tu interior. Cuando fui a la imprenta a retirar las copias de mi libro, recién comencé a tomarle el peso a lo que había hecho y que lo que había escrito iba a comenzar a volverse algo público. El poemario es una muestra de atrevimiento. Hay que dejar de asustarse. Hay que hacer las cosas.