¡Estamos preocupados, es importante manifestarlo! Actualmente se vive un clima político complejo, que está paralizando el fortalecimiento del proceso de regionalización de una manera inesperada. Hemos visto cómo algunos parlamentarios de nuestra región, así como también de otras regiones, han puesto en tela de juicio el actuar de los Gobiernos Regionales, sin medir consecuencias, con frases sin fundamentos, distorsionando la realidad, situación que se extrapola a otros niveles, donde se ha instalado una atmósfera de desconfianza a las capacidades de los Gobiernos Regionales, en términos de gestión de la inversión y la calidad de los gastos.
El "caso convenios" ha revelado serias irregularidades en los traspasos de recursos, como derechamente en actos de corrupción, situación que condenamos y que, como región, nos exige revisar nuestros procedimientos internos, hacer las autocríticas correspondientes en el seno de la Asociación de Gobernadores y Gobernadoras, con el objeto de revisar también malas prácticas. Sin embargo, quiero ser claro en esto, no se puede meter a todos en el mismo saco; este Gobierno Regional ha tratado de hacer bien las cosas, ha transparentado, mejorado sus mecanismos de control y ha democratizado los procedimientos, incorporando al Consejo Regional en todo acuerdo que signifique transferencia de recursos, una vez que los proyectos o programas han sido revisados técnica, financiera y legalmente.
Se ha instalado una sensación de que los Gobiernos Regionales gastan en cualquier cosa, no tienen líneas de acción en sus inversiones y, por consiguiente, gastan por gastar. Indudablemente eso no se condice con la realidad, ya que cada uno de nosotros tiene un programa de gobierno al inicio de nuestro mandato y en el caso nuestro, además tenemos una Estrategia Regional de Desarrollo recién actualizada. Las observaciones y críticas no fundadas, no consideran los esfuerzos que hacemos las regiones, con las dificultades que tenemos las regiones para tanto requisito administrativo que cumplir, ni con las situaciones imprevistas internas y externas.
Se está poniendo en duda la autonomía de las regiones, se pretende en definitiva ¡afirmar el centralismo!
No cabe duda que todo es perfectible, necesitamos instrumentos de mayor control, pero lo que más necesitamos es apoyo, compañía de nuestros parlamentarios, que nos ayuden a avanzar en las grandes tareas. El año pasado pusimos las alertas, cuando se generó la ola de empresas que se fueron a la quiebra producto de la inflación, sin embargo hubo una reacción tardía del Gobierno y nula reacción del Parlamento, recién estamos retomando los procedimientos para colocar en ejecución esos proyectos.