Cambio de hora
Hoy tenemos que adelantar nuestros relojes en 1 hora, pasando así al horario de verano en nuestro país, pero ¿cuáles son los verdaderos efectos del cambio de horario en la salud?
Según lo que señala la Sociedad Americana del Corazón hay varios estudios que demuestran los efectos dañinos en la salud al adelantar 1 hora en primavera. Por ejemplo, un estudio realizado por académicos de Medicina de las Universidades de Michigan y Colorado, en Estados Unidos, demuestran que puede aumentar el riesgo en un 24% de tener un infarto el día siguiente, o sea el domingo, y en menor grado al día subsiguiente, que sería el lunes. Este riesgo queda de mayor evidencia en aquellas personas que tienen antecedentes de enfermedades cardíacas.
Por otra parte, un estudio realizado por miembros de la Sociedad Cardiaca de Finlandia encontraron que el cambio de hora aumenta el riesgo en un 8% del desarrollo de un accidente cerebrovascular isquémico hasta los 2 días siguientes al cambio de hora.
Ahora por qué se produce esto, la teoría es que estos eventos se desencadenan por el cambio de nuestro reloj interno, es decir, nuestro ciclo circadiano como por ejemplo el dormir 1 hora menos, la desregulación del sistema inmune y el de nuestro tono simpático.
El dormir menos implica una deprivación del sueño, que puede alterar los procesos de nuestro cuerpo como también la respuesta inflamatoria, aumentando el riesgo de eventos cardiovasculares.
Por otra parte, el cambio de horario afecta nuestro sistema inmune, ya que la respuesta inmune.
Asimismo, nuestro tono simpático cambia, que es por ejemplo el que tiene relación con el estado de alerta cuando nos despertamos en la mañana. Este tono estimula una serie de señales que le dicen al cuerpo, ¡Hey!! estás despierto, tienes que funcionar. Cuando una persona está deprivada del sueño, por esta hora menos, el estado del tono simpático aumenta, por lo tanto, aumenta el riesgo de desarrollo de estos eventos cardiovasculares que nos pueden llevar a la muerte.
¿Cómo nos preparamos para disminuir o evitar los daños en la salud del cambio de hora? Empezando por recibir la mayor cantidad de luz posible, esto puede ayudar a empezar a ajustar el ritmo circadiano para el cambio que se viene. Comenzar a relajarse o dormir un poco más temprano en las noches anteriores. Sabemos que nunca se podrá recuperar el sueño perdido, pero es importante llegar descansado al día que se cambie la hora.
Francisco Álvarez Román Académico UNAB
Mes de la Patria
Ingresamos al mes de la Patria, en que los chilenos nos preparamos a celebrar nuestras Fiestas Patrias.
Pero este año cada uno de los hijos de esta tierra debemos hacer prevalecer la cordura, el respeto, la responsabilidad, y sobre todo hacer crecer la confianza en cada uno de nosotros. Todos sabemos que es el mes de las alegrías, pero también es mes de reconciliarnos, de olvidar la violencia para soñar con una hermosa convivencia , de hacer prevalecer la paz por todas nuestras diferencias.
Nuestros país nos necesita a todos. Y nadie está ajeno de lo que somos, de lo que hemos vivido. Debemos hacer el esfuerzo de que nuestras manos se unan y solidaricen en un solo sentimiento y una sola bandera, condición esencial cuando llegado el momento de celebrar tengamos la segura convicción que somos hijos de un solo suelo, que la cordillera que nos acompaña u el mar que nos rodea sean el símbolo de lo que dice nuestro himno Nacional. Chile. es uno solo no puede dividirse en dos porque nos destruye lo mas profundo de la armonía y el alma nacional.
Arturo Goddard Bravo Profesor Normalista normalista1949@hotmail.com
Arzobispo Piñera
El arzobispo Bernardino Piñera, sobre el cardenal Raúl Silva Henríquez, dio el siguiente testimonio "Él era un hombre austero, un nombre de deber, un luchador. Un hombre que fue muy incomprendido y muy golpeado. Su acogedora mesa de comedor fue para él un refugio, un descanso en las horas amargas. El cardenal era fuerte; admiré su prudencia. Tenía gran capacidad de liderazgo.
Sabía decir lo que había que decir sin rodeos, a veces con vehemencia, con pasión; pero, era prudente. Solía decir ¡Los santos que recen, los sabios que enseñen, pero que gobiernen los prudentes!"
Derico Cofré Catril derico.cofre@hotmail.com