Slep y escasez de profesores
Varios temas desafían a la educación y esta semana, además, se aplicará el SIMCE.
Todos los alcaldes de la región han manifestado su inquietud por los problemas que pueda traer la implementación de los Sistemas Locales de Educación Pública, SLEP, en Los Ríos. Si bien la fecha de entrada en vigencia podría ser hacia 2029, los jefes comunales temen que suceda algo similar a lo registrado en Atacama, donde 30 mil escolares se encuentran sin clases debido al paro de docentes por el mal funcionamiento del sistema.
Este cambio debía ser una solución a los problemas de la educación municipalizada, que por años fue señalada como deficiente; sin embargo evidencia una tendencia al centralismo en las decisiones y en los recursos, que dificultaría aún más el funcionamiento de recintos públicos con calidad.
A ese problema, se suma uno ya advertido desde hace una década, pero que esta semana ha vuelto a la agenda pública gracias a estudios de Elige Educar: el déficit creciente de profesores que presenta Chile. Significa que en 2025 faltarán de 26 mil educadores en sala. Esto, considerando tanto el abandono de carrera creciente que se registra tras primer año de ejercicio profesional, como la baja de matrícula en las universidades. De acuerdo a datos de la USS, en 2018 la cantidad de estudiantes que ingresó a estudiar Pedagogía era de 18 mil jóvenes; pero en la actualidad se llega a la mitad de esa cifra, en todo el país.
En Los Ríos, de acuerdo a datos del Ministerio de Educación, ejercen 6.513 profesores, para un universo de 81.674 estudiantes. De ellos, el 52% trabaja en dependencias municipales (aunque el 45% de los escolares asiste a ese sistema); el 43% en subvencionadas (donde concurre el 49,6 % de los alumnos) y el 4% en particulares (4,6% de estudiantes). La región tiene, además, uno de los porcentajes más altos de docentes en el área rural, con 28%.
A esas voces de advertencia, hay que sumar las secuelas de pandemia con deserción educacional y problemas de convivencia. Es decir, grandes desafíos que el sector debe enfrentar con urgencia y que sin duda quedarán en evidencia nuevamente tras la aplicación del Simce 2023, programado para mañana y el jueves, en los cuartos básicos y segundos medios.