¿Diálogos o lobby?
Ana María , Bravo Castro, Diputada Los Ríos
Según la Biblioteca del Congreso Nacional "Lobby son las gestiones o actividades pagadas que hacen personas o entidades, chilenas o extranjeras, para promover, defender o representar cualquier interés particular o para influir en las decisiones que, en el ejercicio de sus funciones, deban adoptar algunas autoridades y funcionarios."
Quienes desempeñas la tarea del Lobby son denominados Lobbistas y deben influir en personas que, en razón de su función o cargo, tienen atribuciones para tomar decisiones relevantes.
Recientemente hemos sido testigos, de un escándalo mediático que involucra a distintas autoridades de Gobierno, directorios de empresas y Pablo Zalaquett, exalcalde y reconocido militante de la UDI.
Si existen las leyes estas deben cumplirse y Ley de Lobby N°20.730 no es la excepción, tomando en cuenta que toda la información para su uso correcto está disponible en internet, en la plataforma www.leylobby.gob.cl
El cumplimiento y fiscalización de esta normativa ha sido deficiente, tomando en cuenta que los registros de lobby con alcaldes se han quedado en un 75% en los últimos 7 años. Además, según datos de la Estrategia Nacional de Integridad Pública recién lanzada por el gobierno, entre los años 2018 y 2022, solo se han cursado 29 sumarios por infracción a la ley, de los cuales ninguno ha resultado en sanción efectiva.
Entiendo la urgencia y la necesidad de diálogo entre los distintos sectores y todos sabemos que es la única manera de hacer avanzar las reformas del Gobierno. Pero no comparto la forma en que se hizo, ya que este tipo de situaciones afecta la percepción ciudadana sobre la política y los "vínculos que debe establecer con el mundo privado", en un contexto en que la importancia del Estado se pone constantemente en tela de juicio por los sectores más extremos de la derecha.
La probidad y transparencia son un valor que no puede trastocarse por ningún motivo, más aún si tiene relación con el sector público y la administración del Estado, que es reflejo de la construcción de un país en el presente y con miras al futuro.