¿Qué cambios ha habido desde la elección de autoridades regionales?
PROYECTO FONDECYT. Es liderado por el decano de FACEA UACh, Egon Montecinos. Arroja, entre otros, que no se ha logrado canalizar problemáticas regionales estructurales o complejas.
Existe un valor democrático intrínseco en la elección de autoridades regionales -consejeros y gobernador- pero se mantiene aún un débil vínculo con la ciudadanía, así como también un bajo conocimiento de las autoridades regionales, y si antes del caso "convenios" éstas eran poco conocidas, después de este hecho se hicieron más conocidas, dado que éste se difundió masivamente asociándolos a situaciones de falta a la probidad.
Por otra parte, si con autoridades regionales electas se produciría una canalización de las problemáticas regionales estructurales, complejas o "calientes" en cada región (agua, mapuche, pesca, conectividad, medio ambiente, zonas de sacrificio) eso no ha sucedido, ya sea por la ausencia de competencias o por razones asociadas a liderazgo en estas materias.
Estas son parte de las conclusiones del proyecto Fondecyt 1220165 "Procesos de descentralización y gobernanza. Dinámica, factores y actores determinantes de la gobernanza democrática regional en Chile", cuyo investigador responsable es el decano y académico de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas (FACEA) de la Universidad Austral de Chile, Egon Montecinos.
Objetivos
El investigador explicó que el objetivo del proyecto es establecer si a partir de la elección de autoridades regionales -consejeros regionales en 2013 y gobernador regional en 2021- se ha ido modificando la relación con la comunidad regional, a través de formas más vinculantes de participación y de canalización de las problemáticas regionales, especialmente las más complejas o estructurales de las regiones.
En esa línea, detalló que "nuestro proyecto se planteó como hipótesis que los cambios incrementales hacia la descentralización no necesariamente han ido configurando tipos de gobernanza democrática regional que puedan canalizar las problemáticas complejas de las regiones, dado que estos procesos de cambio no fueron acompañados de robustas atribuciones y competencias y porque el diseño de las reformas no fue impulsado por fuerzas políticas regionalistas, sino más bien centralistas".
El proyecto dura hasta 2026 y abarca cinco regiones: Ñuble, Biobío, Araucanía, Los Ríos y Los Lagos. Según explicó Montecinos, a fin de avanzar hacia resultados, se realizaron entrevistas individuales y grupales y también -precisó- "nos apoyamos en resultados de la encuesta Barómetro Regional".
"En esta etapa nos encontramos realizando actividades de difusión y puesta en discusión de los principales resultados". Y con relación a esto último, informó que fueron evaluadas tres dimensiones principales: si ha cambiado la relación de las autoridades con la comunidad y entre las autoridades, si ha cambiado la forma de participación, y si los problemas regionales se canalizan por el gobierno regional.
Principales hallazgos
En torno a esas áreas, el investigador apuntó a los principales hallazgos. Respecto de las "dinámicas de relación", explicó que se puede establecer que antes de elegir autoridades regionales, "las relaciones con la comunidad eran enteramente de tipo clientelar, de no mediar un contacto político con quien estuviera a cargo; por ejemplo, a nivel institucional en la intendencia, era más complejo relacionarse con las autoridades de nivel regional y de nivel nacional. O cuando los consejeros regionales, antes del 2013, eran designados por los concejales, la relación era mediada por estas autoridades en el territorio, y después de que fueron elegidos popularmente los cores, entonces sí o sí se deben más al territorio, y comienza a representar intereses en los gobiernos regionales y a canalizar sus demandas de manera