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un conocimiento para la conservación", aclaró Barría.
Territorialidad
Luis Miguel Pardo, prodecano de la Facultad de Ciencias UACh, trabajó en la instalación y es quien también destacó sus potencialidades.
"Cada vez que uno muestra la ciencia, la forma en que se genera y la información que entrega es porque está sembrando una semilla, más aun si todo eso está dirigido a público escolar. En este caso la divulgación de la ciencia del mar es conducente a la curiosidad y a la conservación. Nuestra intención es llegar a la mayor cantidad de estudiantes y colegios posible, además de poder establecer nuevos puentes con la comunidad local. El laboratorio está en un territorio específico y queremos que sus habitantes sepan qué se hace en nuestras instalaciones", dijo.
Para Marisol Barría otro valor agregado es permitir un acercamiento al mar desde otras perspectivas. "Por ejemplo consideramos a las personas que habitan la costa. Identificamos a quienes se dedican a la actividad extractiva, a los artistas y a los científicos. Les tomamos fotografías y los entrevistamos. Sus testimonios ahora se reproducen en cápsulas de audio como una forma de hacer de la muestra algo más inclusivo para personas en situación de discapacidad visual. Entonces a la exposición te puedes acercar desde la escucha, desde la visión y desde el tacto. Decidimos explorar los sentidos", dijo.
Y agregó: "Hicimos talleres con las juntas de vecinos de la costa, para ver cómo ellos se conectan con el laboratorio, cómo se identifican con lo que ahí se hace; y de esa forma, volverlos protagonistas con sus historias. Por eso la muestra terminó siendo algo representativo de quienes habitan el lugar gracias a que nos compartieron sus memorias individuales y colectivas sobre las formas en que se vienen relacionando con el mar y con la naturaleza desde la infancia".
Todo lo anterior está en el módulo "El mar y su gente".
Tecnología
Una de las innovaciones de "Kallfüko: Sumérgete en la Costa de Valdivia" es el uso de gafas de realidad virtual para simular la acción de buceo. Eso permite conocer la costa valdiviana y algunas especies en su hábitat natural con recorridos donde se pueden ver lobos marinos, medusas, crustáceos, etc. En contraste y una vez que el usuario se quita las gafas de realidad virtual, se enfrenta a una infografía y relatos sobre el océano contaminado.
Junto a los niños de la Escuela de Punucapa y sus familias, se grabaron videos de un muestreo participativo para la cuantificación de la basura en la costa. De esa manera se determinó cuál es el tipo de basura más abundante y el peligro de los microplásticos en la cadena alimentaria.
En la muestra además hay acuarios, un esqueleto de delfín, aves taxidermizadas y algas herborizadas. Las visitas comenzaron en mayo con una inauguración en la que la Seremi de Ciencia, Maite Castro, valoró la iniciativa del laboratorio.
"Éste es un proyecto muy interesante porque busca socializar el conocimiento científico del mundo marino a las comunidades. Nos permite conocer qué está ocurriendo con el cambio climático, sus efectos sobre los pueblos que habitan el borde costero, y por sobre todo la importancia que tiene el litoral, y su biodiversidad, sobre estas comunidades. Ésta es justamente una de las características del concurso Ciencia Pública, que busca promover que el conocimiento salga más allá de las cuatro paredes de un laboratorio y llegue a todos los sectores de la sociedad", dijo.
Entre los visitantes la valoración es igualmente positiva.
"La muestra es maravillosa. Me parece extraordinario para los niños y también para los adultos. Una de las mejores partes es la posibilidad de sentirse dentro del mar. También poder conocer más de los tiburones. Todo es muy interesante. Me encantaría que los colegios puedan venir", dijo Adriana Ojeda.
"Todo es muy lindo. Es excelente. Los guías son muy claros para explicarnos todos. Se entiende todo muy bien. Me parece espectacular lo que hacen en el laboratorio. Quedé fascinada. Lo que más me gustó fue haber podido tocar los tiburones pintarroja. Es muy bueno es también de mostrar el efecto negativo de la basura y de cómo afecta a los animales. Esta muestra es buena invitación para tomar conciencia para ver lo rico que es nuestro mar", dijo Marlis Westermayer.
"En este caso la divulgación de la ciencia del mar es conducente a la curiosidad y a la conservación. Nuestra intención es llegar a la mayor cantidad de estudiantes y colegios posible, además de poder establecer nuevos puentes con la comunidad local".
Luis Miguel Pardo, Prodecano Facultad Cs. UACh
"Hemos pensado que este proyecto es una experiencia de aprendizaje no solo para los estudiantes, sino que también para los adultos. Más que ir a visitar una muestra como en cualquier otro museo, queremos que cada cual pueda vivir una experiencia inmersiva".
Marisol Barría, Directora del proyecto
49 millones del concurso Ciencia Pública fueron adjudicados para la iniciativa creada por la UACh. El financiamiento es del ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación.
60 minutos es el rango de tiempo destinado al recorrido de la exhibición que tras su inauguración en mayo permanecerá abierta permanentemente en el laboratorio.
10 personas es la cantidad mínima sugerida por grupo interesado en visitar la muestra ubicada a 30 kilómetros de Valdivia, rumbo a Curiñanco.
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