Una fecha para hablar de violencia
En la cercanía del 25 de noviembre se hace necesario reflexionar sobre esta temática.
Se acerca la conmemoración del 25 de noviembre, que es el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Este 2024 el mundo llega a este día con un llamado de atención de las Naciones Unidas, respecto de un aumento de todos los tipos de agresión de género, ya sea por conflictos armados, situaciones dentro de los hogares, simbólicas o económicas. La pobreza tiene rostro femenino y eso ha recrudecido, restando oportunidades de desarrollo a la mitad de la población.
La fecha fue instaurada en memoria de la hermanas Minerva, Patria y María Teresa Mirabal, quienes en 1960 fueron asesinadas en República Dominicana por la dictadura de Rafael Trujillo. Su lucha por la democracia sirvió de ejemplo mundial y en su martirio físico (las torturaron y luego se intentó pasar el hecho como un accidente de tránsito) fue simbolizada la necesidad de erradicar todo tipo de agresiones que sufren las mujeres en función de su condición de tales. La efemérides convoca a esa reflexión.
En Chile se han desarrollado a lo largo de los últimos 35 años múltiples acciones para tomar conciencia. El país ha ratificado tratados internacionales en esta línea y mantiene múltiples leyes que condenan la violencia intrafamiliar, el femicidio, el acoso y la discriminación, además de un sistema de protección en constantes revisiones para ayudar a las víctimas. Pese a ello, las cifras siguen siendo altas. Se calcula que una de cada cuatro mujeres ha vivido algún episodio de este tipo a lo largo de su vida y la cantidad de femicidios (asesinato de una mujer por razones de género) este año alcanza a 35 casos consumados y 251 intentos, según datos del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género (SernamEG).
En Los Ríos, no ha habido casos de mujeres asesinadas este año, pero sí van cinco intentos de crímenes y según la Subsecretaría de Prevención del delito, se han producido 1.700 casos de violencia en el contexto doméstico. Son números menores que los de 2023, pero no dejan de preocupar, pues cada dato en la estadística es la historia de una tragedia.
En la proximidad del día 25 resulta importante abordar la temática en los diversos contextos, para contribuir a que ella sea visible y que no se le minimice o trivialice, como lamentablemente ha ocurrido en medio de las polémicas recientes.